*** Enero 2016 ***

TRADUCCION: Alberto Flórez-Granados

LA RENOVACIÓN DE LA MENTE

"No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta" Romanos 12:2.

La batalla está en la mente

El principal campo de batalla que todos enfrentamos está en nuestras mentes. Es en nuestra mente donde luchamos con nuestros pensamientos, los cuales pueden detenerse en las cosas negativas, tal como percibimos lo que otros han podido habernos hecho, lo que puede habernos herido o causado dolor; algo que nos hiciera sentimos rechazados, incluso pensar cosas negativas acerca de nosotros mismos. Nuestra mente puede ser una 'mina quiebra pata ' de pensamientos confusos los cuales nos llevan por un camino que a menudo da lugar a una gran cantidad de sentimientos y emociones negativas, los cuales pueden dar lugar a comportamientos negativos.

Sin embargo Efesios 4:23 nos dice que debemos "ser renovados en el espíritu de nuestra mente." Puede haber una renovación de la mente, es lo que todos necesitamos. Debe haber lugar a una renovación espiritual. No es algo que simplemente suceda. Hay cosas que tenemos que hacer, en unidad con el Espíritu Santo, de manera tal que empecemos a funcionar más y más con una mente renovada.

Presenten sus cuerpos

"Así que, hermanos, os ruego por la misericordia de Dios, que presentéis vuestros cuerpos" Rom.12:1a. Tenemos que hacer algo: debemos presentar, hacer una ofrenda, de nuestros cuerpos. Esto es algo personal; algo que todo individuo puede hacer.
La palabra "cuerpo" aquí se está refiriendo al cuerpo como un todo; 'el instrumento de la vida "es como lo llama Strong en su Concordancia. Este versículo se refiere al hombre completo, es decir, al cuerpo físico, al alma y al espíritu.

Un sacrificio vivo

"sacrificio vivo, santo, agradable a Dios" Rom.12:1b La presentación de nuestros cuerpos debe ser como un sacrificio vivo. Esto parece ser una contradicción. 'Sacrificio' indica la muerte de algo, y nosotros debemos ofrecernos a nosotros mismos como un sacrificio vivo. ¡Tal vez hay algo en mí que tiene que morir!
Este sacrificio debe ser santo, y esto es aceptable a Dios. La palabra santo significa sagrado, puro, sin mancha, consagrado, separados, a imagen de Dios, la naturaleza íntima de Dios, apartado para Dios, reservado para Dios y para Su servicio. Un Dios santo llama a un pueblo santo [de la Palabra Riqueza en Hechos 7:33 BSFL]. Dios quiere que Su naturaleza se manifieste en nosotros más y más. Para que esto suceda debemos estar dispuestos a hacer morir las cosas en nosotros que nos impide ser puros, sin mancha y semejante a Dios en nuestra naturaleza más íntima.

Nuestro culto racional

"que es vuestro culto racional" Rom.12:1c. Las Escrituras dicen que este sacrificio es nuestro culto "razonable" o "racional". La palabra "racional" es la palabra 'logikos' y proviene de 'logos'. Se refiere a nuestra facultad de razonar. A medida que nuestra mente es renovada por la Palabra de Dios, comenzamos a meditar de una manera racional sobre las misericordias de Dios. Las misericordias de Dios, vienen del mismo corazón de Dios. Dios es misericordioso. Es parte de su más profunda naturaleza (Ex 34:6).
El sacrificio debe ser inteligente; adoptamos la decisión de hacer algo, a diferencia de un sacrificio ofrecido por ritualismo y por compulsión. El acto de presentar los creyentes sus cuerpos como sacrificio vivo significa estar de acuerdo con la inteligencia espiritual de aquellos que son nuevas criaturas en Cristo y son conscientes de la misericordia de Dios.
Otra palabra para "servicio" es la palabra 'culto'. Así que la ofrenda de nuestros cuerpos como sacrificio vivo se convierte en un acto de nuestra adoración a Dios.

Romanos 12: 2a

"No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestra mente" Romanos 12:2a.
Observemos estas dos palabras subrayadas:
 Conforméis
 Transformaos

No os conforméis

La palabra griega es conformada CS # 4964 y se refiere a conformarse así mismo de acuerdo con la moda exterior o la apariencia exterior, acomodándose uno mismo a un modelo o patrón. La palabra hace hincapié en el cambio hacia el exterior.

Sino transformaos

La palabra griega es transformado CS # 3339 'metamorphoo' significa transformar, pero traducida como: cambio, transfigurar y transformar. Tiene la connotación de algo que se somete a un cambio completo, que bajo el poder de Dios, encontrará expresión en cuanto a carácter y conducta. 'Morphe' enfatiza un cambio interior.
Esta palabra se utiliza para transformarse en Mateo y Marcos, en referencia a Jesús en el monte de la transfiguración; y en 2 Corintios 3:18 donde se refiere a nosotros, "mirando a cara descubierta, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como el Espíritu del Señor". La transformación sólo puede tener lugar por el Espíritu del Señor obrando en nosotros.

La renovación de la mente

Somos transformados por la "renovación de vuestro entendimiento" (Romanos 12: 2a). Para que se dé un cambio interior, nuestras mentes tienen que ser renovadas Tito3:4 se refiere a la aparición de la bondad y el amor de Dios nuestro Salvador y luego dice en el versículo 5 "no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo...".
La palabra griega usada renovación CS #342 y sugiere una renovación, restauración, transformación y un cambio de corazón y vida. En Romanos 12:2 indica un cambio completo para mejorar, un ajuste de nuestra propia visión moral y espiritual. En este versículo Tito 3:5, Pablo destaca la obra del Espíritu Santo en la transformación de la vida, [de la Palabra de riqueza en la página 1.721 mil BSFL].

Necesitamos que el Espíritu Santo obre en nuestras vidas para que se lleve a cabo la transformación y renovación de nuestra mente. 1 Pedro 1:13 dice que debemos "ceñid los lomos de vuestro entendimiento." La palabra "mente" en este versículo se refiere al don de la aprehensión; la facultad de pensar. Cuando esta facultad es renovada por el Espíritu Santo toda nuestra mentalidad cambia del negativismo temeroso de la mente carnal al pensamiento positivo de la mente espiritual que nos es inspirada [ver Palabra Riqueza en Marcos 12:30].
La manifestación exterior de la transformación, por la renovación de nuestra mente, es que nuestra forma de pensar cambia, lo que a su vez se refleja en los cambios de nuestras acciones y comportamiento.

Llamado a una conducta santa

Entonces Pedro continúa diciendo: "Como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda su conducta, porque está escrito: 'Sea santos, porque yo soy santo '" 1Pedro 1:14-16. No debemos conformarnos con los comportamientos del mundo, sino que debemos permitir que la naturaleza de Dios se manifieste en nosotros más y más en la medida en que somos transformados por la renovación de nuestra mente. En la medida en que se renueva nuestra mente, reconocemos de manera más clara las cosas que son propias de nuestra naturaleza carnal, de tal manera que podemos asumir decisiones piadosas para adoptarlas a nuestra nueva naturaleza.
Pablo en el libro de Efesios llama el "hombre viejo": "En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios, en |la justicia y santidad de la verdad" Efesios 4:22-24. Esto es algo que tenemos que optar. Se requiere una participación activa de nuestra parte.

Las características del "hombre nuevo" se exponen en Colosenses 3:12-16. Col. 3:10 dice que hemos " ." Por medio de la renovación de la mente que se está operando tenemos que "dejar que la palabra de Cristo habite en vosotros en abundancia en toda sabiduría, enseñándoos y exhortándoos unos a otros con salmos, himnos y cánticos espirituales, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor " (v.16).
¡Tenemos que llenar nuestra mente con la palabra de Dios! Leer la palabra. Escuche música de adoración, etc.

Hay una guerra en la mente

En 2 Corintios 10:3-6 el apóstol Pablo se refiere a la guerra que se desarrolla en la mente. Él nos dice de una guerra no según la carne, luego pasa a decir: "Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo" (v.4-5).
La mente puede estar llena de:
Fortalezas - estratagemas, artilugios de la mente
Argumentos -, ideas y actitudes rebeldes arrogantes
Altivez - se refiere al pensamiento orgulloso

Todas estas cosas quieren exaltarse a sí mismas por encima del conocimiento de Dios. Tenemos que ser obedientes a la palabra de Dios, de manera que comencemos a creer lo que nuestro conocimiento de Dios nos dice, en vez de dar lugar a los pensamientos que se agolpan en nuestra mente.

Éstas son todas las cosas que deben ser derribadas, echadas fuera y llevadas cautivas a la obediencia de Cristo. La palabra obediencia tiene que ver con la forma en que escuchamos. Debemos ser obedientes a lo que la palabra de Dios nos dice. Luego Pablo continúa diciendo que debemos estar "preparados para castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea perfecta" (v.6).

Para que la renovación de la mente tenga lugar debemos tener conocimiento de lo que la palabra de Dios dice en realidad. Entonces tendremos una respuesta a los argumentos y a la altivez que quieren exaltarse a sí mismos en nosotros.
Debemos traer todos los dispositivos de la mente en cautiverio a la obediencia de Cristo. Esto es algo que elegimos hacer. Tenemos que tomar el control de nuestros propios pensamientos; mantener esos pensamientos cautivos, y llevarlos de nuevo a la obediencia a Cristo.

La renovación tiene lugar en nuestro "ser interior"

En Apocalipsis 2:23b Jesús dice: "Yo soy el que escudriña la mente y el corazón"
La palabra para mente en este versículo es la palabra griega 'nephros', traducido, 'riñón' en el RV. Significa: riñón, que es la mente lo más íntimo; literalmente, riñón y se utiliza metafóricamente como referencia a los más íntimos pensamientos, sentimientos, propósitos y voluntad del alma.

Es en esta parte interna profunda en la que debemos ser renovados. Por eso Pablo dice, "ceñid vuestros lomos" (Ef.6:14a) y Pedro nos dice, "ceñid los lomos de vuestro entendimiento". Necesitamos que la verdad de la palabra penetre muy dentro de nosotros, para que podamos ser plenamente establecidos en la verdad.

Tener una mente renovada nos permite conocer la voluntad de Dios

La parte final de Romanos 12:2 dice: "para que comprobéis [prueba, aprobar, también traducido como discernir] cuál sea la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios". Pablo quiere que tengamos una mente renovada, para que sepamos cuál es la voluntad de Dios para nosotros. Él dice que la voluntad de Dios para nosotros es buena, agradable y perfecta.
La palabra traducida como "buena" describe lo que es bueno en su carácter o constitución, es beneficioso en su efecto. Podemos saber que el hacer la voluntad de Dios nos será beneficioso.

La palabra "aceptable" significa "totalmente agradable", y también se puede traducir como 'halagüeño'. La voluntad de Dios para nosotros, será totalmente agradable para nosotros cuando estemos caminando con una mente renovada. No tendremos ningún problema aceptando Su voluntad en nuestras vidas, Puesto que ya no estaremos discutiendo en nuestras mentes sobre si queremos, o no obedecer lo que Dios nos esté diciendo que hagamos.
'Perfecto' es la palabra griega 'teleios', y significa "completo". La voluntad de Dios para nosotros ya está terminada, completa, perfecta, y Él quiere que discernamos Su voluntad, de modo que podamos estar de acuerdo con Él y caminar en ella. Pero sólo podemos hacerlo si hemos sido "transformados por la renovación de [nuestra] mente".

CÓMO CAMINAR CON LA MENTE RENOVADA

Arrepentirse

En primer lugar tenemos que llegar al arrepentimiento, porque el arrepentimiento tiene que ver con un cambio de mente. Arrepentirse es la palabra griega 'metanoeo', y significa tomar una decisión; traducida como un cambio de mente, lo que a su vez conduce a un cambio de propósito y de acción.
Hay tres pasos:
1. Recibir un nuevo conocimiento.
2. Lamento por nuestra conducta anterior / forma de pensar
3. Cambio de pensamiento y comportamiento

Recibir la palabra de Dios

Ya hemos visto que para que tenga lugar la renovación de la mente tenemos que "dejar que la palabra de Cristo habite en abundancia en vosotros" (Col 3:16). Por lo tanto tenemos que pasar el tiempo leyendo la palabra, y dejar que la palabra de Dios nos lave (Efesios 5:26).

Mantenga su enfoque en Jesús

Dios promete paz a aquellos que tienen una mente totalmente centrada en Él "Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado" Isaías 26:3. La clave aquí es mantener la mente fija en Jesús, confiando plenamente en todo.

No esté ansioso, sino ore

Filipenses 4:6-7 nos da algunas claves más sobre la forma de caminar en la mente renovada "Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús".
1. No se preocupe ni se inquiete por nada.
2. Ore por las cosas que le preocupen.
3. Hable con Dios acerca de sus necesidades.
4. Agradezca, dé gracias.
5. Reciba Su paz.

Medita en las cosas divinas

Filipenses 4:8 "Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si hay algo digno de alabanza - en esto pensad. Meditar, pensar, llene su mente con estas cosas.

Janet Galligan